Los últimos incidentes registrados en la Punta de San Felipe, uno de ellos con dos heridos en una pelea en octubre, y el incremento de afluencia a la zona, han llevado al Ayuntamiento a reforzar la seguridad.
El alcalde, Bruno García, ha anunciado en rueda de prensa tras la Junta de Gobierno Local que desde esta noche y los viernes, sábados y vísperas de festivos durante las fiestas el servicio de Policía Local se reforzará con un mando y siete agentes más.
El objetivo, ha explicado, de los funcionarios destinados es practicar controles de tráfico para evitar “la entrada de armas o sustancias estupefacientes” y prevenir “reyertas y actividades ilícitas”.
El dispositivo se desarrollará entre la una de la madrugada y las siete de la mañana.
Asimismo, ha informado de que la Policía Local también reforzará la vigilancia en las zonas comerciales del casco histórico durante las fiestas, con una mayor presencia de agentes entre las once de la mañana y las nueve de la noche.