11 meses sin sobrar. Es la situación que atraviesan tres notificadores municipales del Ayuntamiento de Sanlúcar. La empresa subcontrata se ha declarado en quiebra y lleva casi un año sin pagar a estos tres padres de familia. "Pues sobrevivimos a expensas de todo el mundo. Con ayudas de la familia, de mi madre o de amigos teniendo a mis hijos estudiando", lamenta uno de los afectados.
La solución pasa por municipalizar este servicio y absorber a estos tres trabajadores. Sin embargo, el Partido Popular presentó una moción para rescatar a los trabajadores siendo aprobada por todos los grupos municipales a excepción del que gobierna, Izquierda Unida. "Estamos sorprendidos de que esto haya ido a pleno y no se ejecute. No tiene sentido", denuncian.
"Cuando entraron a gobernar estábamos ilusionados porque era un partido de izquierdas y pensábamos que quería municipalizar este servicio que a día de hoy es privado. Pero se ve que no", critican desde el Comité de Empresa del Ayuntamiento.
Los afectados continúan trabajando a pesar de no percibir salarios ya que "no queremos perder ningún derecho". Hay que tener en cuenta que los tres empleados llevan más de 30 años trabajando en el Ayuntamiento de Sanlúcar. Debido a esta situación, los trabajadores han decidido concentrarse en la puerta del Ayuntamiento para reclamar la municipalización del servicio.
Por su parte, la alcaldesa continúa haciendo oídos sordos al calvario que atraviesan estos vecinos que hasta fueron desalojados del Ayuntamiento por la Policía Local durante su última protesta. "Nos mandaron a la Policía Local para que no estuviéramos aquí. Dime qué daño hacen aquí tres trabajadores reclamando sus derechos y más con un partido de izquierda gobernando. Es que no le vemos sentido", explica José Luis Lama, presidente del Comité de Empresa del Ayuntamiento.
Sindicatos como UGT, CCOO y la Junta de Personal han respaldado a los empleados y exigen a la alcaldesa que solucione esta situación de una vez por todas. "Es una cuestión de sentido común y vamos a seguir apoyando a los afectados hasta el final", explican los representantes sindicales.
Es el calvario de tres vecinos de Sanlúcar que, a pesar de estas circunstancias, continúan trabajando para no perder su empleo. "Los ciudadanos pagan el impuesto, el Ayuntamiento paga a la empresa y los trabajadores no reciben su salario porque la empresa está en quiebra. La política se ha puesto muy rara aquí en Sanlúcar y nadie rescata este servicio siendo fácil porque son solo tres trabajadores", lamentan desde el Comité de Empresa.
