Este presupuesto está cofinanciado por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, lo que según el consejero refleja la intensa colaboración entre la Administración central y la autonómica para la mejora de este espacio natural, declarado por la UNESCO como una de las nueve Reservas de la Biosfera ubicadas en territorio andaluz.
Fruto del acuerdo de colaboración con el Ministerio, Díaz Trillo ha anunciado la puesta en marcha de un paquete de actuaciones compuesto por una decena de medidas para el fomento de valores ambientales y turísticos del Parque como Reserva de la Biosfera. Esta iniciativa supondrá una inversión de un millón de euros, entre cuyos elementos más destacados figuran la elaboración de un catálogo de lugares para la práctica de deportes de turismo activo y el diseño de algunas rutas vinculadas al patrimonio hidráulico. Del mismo modo, se iniciará un proyecto para poner en valor algunas zonas como puntos de interés para instalación de infraestructuras de uso público o el diseño de senderos peatonales por áreas a las que estaba restringido el acceso.
Junto a estos trabajos, de carácter más científico, el titular andaluz de Medio Ambiente ha resaltado también obras emblemáticas, como la recuperación de la antigua ruta de Félix Rodríguez de la Fuente, un recorrido de gran atractivo que se quiere potenciar mediante una orientación más valiosa desde el punto de vista ambiental y para potenciar el interés turístico.
Igualmente, en breve se iniciarán las obras de adecuación de la antigua piscifactoría del río Borosa, para convertirla en el Centro de Referencia de Fauna Acuática Amenazada que complementará el Centro de Visitantes del río Borosa, cuyas instalaciones han sido completamente renovadas. Igualmente, durante 2011 se llevará a cabo la adecuación de las infraestructuras básicas del Parque Cinegético ‘Collado del Almendral’, donde se localiza una importante representación de ungulados en régimen de semilibertad.
Ambas iniciativas están dotadas con fondos europeos cedidos por el Ministerio, lo que sumado a la inversión de la Junta implica un presupuesto de 1.380.000 euros. Según el consejero, la remodelación de estos espacios pretende garantizar nuevos atractivos para los visitantes. Con la puesta en marcha de estos proyectos, más los que ya se encontraban iniciados en ejecución, se alcanza más del 75 por ciento de las actuaciones previstas en el Programa.
Por otro lado, Díaz Trillo ha recordado que Cazorla, Segura y Las Villas es uno de los espacios naturales andaluces que ha obtenido recientemente la renovación de la Carta Europea de Turismo Sostenible (CETS), y que es además el que más empresas posee adheridas a este distintivo de calidad, con un total de 22. El consejero ha dicho que actualmente son 18 los enclaves andaluces adscritos a la CETS, aunque el objetivo es extender su implantación al conjunto de los 24 Parques Naturales de la comunidad. Según ha afirmado, “esta iniciativa permite aplicar los principios y criterios de la sostenibilidad y hacer realidad un modelo de desarrollo turístico armónico y respetuoso con el entorno natural, un turismo responsable, de calidad y comprometido con la realidad ambiental de la que extrae sus beneficios”.
El Programa de Revitalización Turística e Impulso Económico del parque natural Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas, aprobado por la Junta de Andalucía, supone una inversión total de 35,48 millones de euros, contempla la puesta en marcha de 35 programas de actuación con la participación de seis consejerías y afecta a 26 municipios. Esta supone una de las inversiones conjuntas más fuertes de la Junta en un parque natural, y la participación de la Consejería de Medio Ambiente se materializa en 14 de los programas, con 26 actuaciones, y un compromiso de inversión de 11,2 millones de euros.
Los objetivos principales del programa son incrementar el bienestar social de los turistas y de los propios residentes de la zona mediante la potenciación de las infraestructuras y servicios públicos; aumentar la rentabilidad que genera el sector turístico desde la óptica del beneficio empresarial y la creación de empleo; garantizar un desarrollo turístico que conserve la identidad del destino y sus recursos autóctonos y; por último, impulsar el desarrollo del turismo de forma compatible con el entorno.
