Técnicos especialistas en desactivación de artefactos explosivos (Tedax) de la Policía Nacional han intervenido una antigua granada de mortero reglamentaria de 81 milímetros que había sido localizada en el interior del trastero de una vivienda de segunda mano recién adquirida en Motril (Granada).
Tras la inspección llevada a cabo con estrictas medidas de seguridad, los agentes determinaron que el artefacto no contenía carga explosiva, ha informado la Policía Nacional.
La intervención policial se inició tras recibirse el aviso del hallazgo de un artefacto potencialmente peligroso con la apariencia de ser una granada de mortero.
Una primera dotación policial desplazada al lugar comprobó que se trataba de una granada de mortero real, no simulada, por lo que se adoptaron las medidas de seguridad necesarias para evitar una manipulación indebida hasta la llegada de los especialistas en este tipo de artefactos.
La granada había sido localizada por la nueva propietaria de un piso de segunda mano comprado recientemente, en el interior de un trastero que estaba limpiando.
Los tedax comprobaron después que se trataba de una granada de mortero de 81 milímetros con el exterior oxidado sin carga explosiva ni de proyección.
Este tipo de proyectil explosivo, explica la Policía, fue muy utilizado por unidades tanto de infantería como de artillería durante la Guerra Civil española, y se ha convertido hoy día para muchos en objeto de coleccionismo.
